"Lo del Camp Nou no son retrasos, es el espíritu de Gaudí", informan el Barça y Limak

“No son obras, es arte. Y el arte no tiene prisa”.

Tras años de planos, renders, promesas y grúas en modo descanso, la directiva del Fútbol Club Barcelona y la constructora turca Limak han decidido hablar claro de una vez por todas.

Según la empresa, los cambios de fecha, las licencias que se hacen de rogar y los renders que envejecen mejor que el vino forman parte de “una estética de la espera que el público quizá no estaba preparado para comprender”. 

Por su parte, la junta defiende que el proyecto atraviesa una “fase de comunión total con el cosmos” donde el calendario “se curva en armonía con las fluctuaciones del universo”, los plazos “fluyen cual idílicos arroyos” y “la constante búsqueda de refinamiento supera las barreras del tiempo”.

“El estadio está vivo. Respira. No puedes ponerle una fecha a un organismo cuántico en transformación perpetua”, añaden.

El jefe de obra explicó: “El espíritu de Gaudí que nos inspira requiere técnicas que no existían en su época… y siguen sin existir, pero confiamos en que aparezcan hacia 2033”.

La apertura será primero espiritual y luego física

“¿Retrasos? Por favor. Esto no es el Bernabéu. Esto es el espíritu de Gaudí, que no se mide en años, sino en eras”. Así de contundente fue Laporta, mientras sostenía una maqueta del Camp Nou cubierta con trencadís y confeti.

“El estadio ya está abierto para todos aquellos que tienen la sensibilidad de ver más allá. Pero si te empeñas en verlo inacabado y lleno de cascotes, es tu propia mezquindad la que te ciega”, añade.

Plazos y costes, nociones rastreras sin altura espiritual

Para atajar las constantes preguntas odiosas sobre plazos y costes deslizantes, la directiva del Barcelona ha declarado:
 
- “¿Coste estimado: Menos que un brasileño de 16 años. ¿Eso es mucho? Pregunta para Deco”. 
- “¿El cronograma? Es catenario. Las fechas cuelgan del techo; si sopla la tramontana, oscilan”.
 
Tras insistir para averiguar cuándo podría estar finalizado el Espai Barça, fuentes internas revelaron que manejan tres escenarios posibles:

- Escenario optimista: 2030, si Gaudí se reencarna y lo termina con sus propias manos.
- Escenario realista: 2044, si se riegan los jardines y todo se desliza armoniosamente.
- Escenario espiritual: cuando las obras de la Sagrada Familia concluyan y la alineación de Júpiter con Oriol Romeu desbloquee el crédito blando turco.

Arquitectura viviente, presupuesto mutante

Según el club, el nuevo Camp Nou no se está construyendo; está rezumando cual rocío de la mañana.

El vicepresidente de infraestructuras explicó que el estadio “está en diálogo constante con un entorno en continuo devenir”, lo cual justificaría que una semana haya avances y la siguiente aparezca un olivo donde antes iba un ascensor.

“Es un estadio con alma. Y como todas las almas catalanas, necesita su tiempo para madurar y para pedir créditos blandos”.

Además, se anunció que el presupuesto inicial no solo se mantiene, sino que “ha alcanzado su forma definitiva”, que no es fija, sino poética y reversible.

La sala Gaudí del estadio: sin fútbol, pero desbordante de mensaje

La primera zona oficialmente terminada del Camp Nou es una sala conceptual donde no se puede jugar, pero sí admirar:

- Ventanas en forma de pantallas del VAR.
- Moquetas en tonos de las mechas de Lamine.
- Un altar dedicado a Iniesta con luces LED que parpadean según la nostalgia de los visitantes.
- Estatuas con forma de Neymar arrepentido, Bartomeu encadenado y Florentino en actitud de espantar demonios.

Visión Limak: “Estamos canalizando a Gaudí desde Turquía”

Consultado el departamento espiritual de Limak, aseguran que el aplomo, que no la lentitud, es una virtud catalano-otomana, y que cualquier intento de acelerar las obras sería un sacrilegio:

“La prisa es cosa del Bernabéu. Aquí hacemos arquitectura con alma. Aunque aún no tenemos techos”.

Desde Ankara, el equipo de arquitectos de Limak confirmó que están inspirándose en el espíritu de Antoni Gaudí, canalizado mediante ayuno parcial y café turco sin filtrar.

“Nos han dicho que Gaudí está tardando más de 140 años en terminar la Sagrada Familia. Nosotros solo llevamos 4. Vamos bien”, sentencian.

El portavoz de Limak también explicó que han sustituido las plomadas por péndulos místicos y los planos por alfombras voladoras.

La obra se rige ahora por el “principio de la curva emocional”: si un día están motivados, avanzan; si no, contemplan.

Visita guiada por el caos (avalada por el mismísimo Gaudí)

El club ha comenzado a ofrecer visitas “Camp Nou Experience”, con audioguía a cargo de un imitador de Guardiola que va susurrando frases como “aquí jugó el mejor cuando aún había gradas”.
 
Los visitantes pueden recorrer:
 
- El túnel sin salida de vestuarios.
- Las escaleras mecánicas que bajan, pero no suben.
- La grada curva sin vistas al campo “para aquellos que saben que lo esencial es invisible a los ojos”.
- Las vigas decoradas con trencadís, usando restos de merchandising no vendido de Arda Turan, André Gomes y Kevin-Prince Boateng.
- Tribunas en espiral diseñadas según la proporción áurea.
- Un altar central con estatuas de Johan Cruyff, Leo Messi y un dron con la cara de Ansu Fati.
 
Además de estadio, el nuevo Camp Nou será basílica, museo y lugar de peregrinación emocional para quienes aún creen en el ADN Barça.

Próximos pasos: desbloqueo espiritual y tokens emocionales

Para financiar la siguiente fase de las obras, el club ha lanzado una serie de productos ilusionantes para todos los aficionados:
 
- Preventa de entradas para partidos que aún no existen. Por 99 € podrás reservar ya tu asiento para la futura semifinal de Champions de 2047.
- Abono Nieta + Nieto: compras hoy y lo disfrutan tus descendientes en la inauguración “definitiva o penúltima”.
- Y por solo 250 €, podrás apadrinar una loseta. Con suerte, la pondrán antes de que Piqué sea presidente del Barça.

Mientras tanto, Laporta promete transparencia total:

“Emitiremos un streaming ininterrumpido de la grúa principal… aunque esté parada, transmite confianza”.

Reacciones 

- Jaume Collboni, alcalde de Barcelona: “Aplaudimos el rumbo ideológico del proyecto del Camp Nou. Las obras que no terminan nunca son el verdadero espíritu de la ciudad”.
- Turisme de Barcelona: lanza el paquete “Gaudí Matchday”: foto con la grúa n.º 7 y audioguía “Poética de andamio”.
- Ministerio de Cultura: propone declarar el Camp Nou Monumento Futurible Nacional, a medio camino entre obra y espectáculo al aire libre.

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